14.4.08

DIÀLEGS DE CORTESANS. Classes magistrals


MARQUÈS. Hola, José. Te llamé el pasado viernes y no estabas.

PEP. Dabía sert a clase.

MARQUÈS. ¿Dónde dices?

PEP. A clase. Como que en mi cargo de asasort immobiliario me hago un poco de ambolico con el sistema métrico dasimal, me han hecho cursart un máster de clarasía y un otro de jugglaría.

MARQUÈS. No entiendo nada.

PEP. Es que allí se astudía métrica. Si prasisamente esta asignatura me lleva por la calle de la amargura. ¿Ustet sabe lo que es apranderse de corasón todo esto del pirriquispondio y el prosalausmático?

MARQUÈS. Es la primera vez que oigo semejantes términos. Oye, me da la impresión de que te has metido en camisa de once varas, con estos estudios.

PEP. No me cadaba otra altarnativa. Cuando plagué de arcalde, a la Janaralidat me ofrasieron el cargo de adjunto sagundo a la subsagrataría de medio ambiente, pero yo les raspondí que o todo o nada. No lo antiendo, este visio que tienen de partir las cosas. Es como si te diesen la rasponsabilitat del área de Comersio y la de Babersio la adjudicasen a un otro.

MARQUÈS. ¿Y cómo te va?

PEP. Pues nos hasen ampollart un futral de cosas. Oh, y los daberes no son ninguna broma.

MARQUÈS. ¿También os ponen deberes?

PEP. ¡Hombre, como los buenos! El último que hemos hecho era de composisión. Taníamos de ascribirt un génaro de poasía que se dise anigma y haserla mano a mano entre dos, a verso por barba y por día. Uno deja irt una pista y el otro va astirando el hilo hasta que lo andavine.

MARQUÈS. Una especie de acertijo, vaya.

PEP. Ecolicuá. Yo ascogí de compañero el camarero del bart a donde voy a almorsart, que también sigue estos astudios porque quiere antrar de funsionario.

MARQUÈS. Ah, muy bien, muy bien.

PEP. Era una aspesia de reáliti chou, porque figuraba que el camarero pragunta al cliente, que soy yo: “¿Qué le apatese al muchacho?” Yo raspondí con una vagadat, para no darle pasasito: “Un cacho.” Antonses él volvió a la
carga: “¿Ancho, el cacho, o bien astrecho?” Ya me había atrapado, porque rasulta que aquello es astrecho pero no podía rasponder con esta palabra por la sansilla rasón que, como dise la reggla númaro sinco, todo término rima por dafinisión consigo mismo, y por tanto es inadmisibble rapatirlo. Tuve de racurrirt a un dicsionario de la rima, y al último ancontré la palabra adacuada: “Arrecho”, que significa tieso. Él que sí que, ni corto ni parasoso, pasa al contraataque: “¿Larguirucho como un nicho?” Me lo puso en bandeja, porque mi raspuesta era fásil: “Lo dicho.” Y él dale otra ves: “¿Crudo, este cacho, o bien cocho?” ¡Damonio de hombre! Yo no tanía ideya de lo que caría dasir cocho y tuve de anviart un meil a la Rayal Academia Aspañola para que me lo aclarasieran. Oh, y vigilando de no ponert una hache donde no corrasponde, porque hubiese hecho el ridículo más aspantoso.

MARQUÈS. Caramba, si que es complicado.

PEP. Cuando me antaré que cocho, en castallano antiguo, es cosido, le raspondí a mi rival: “Biscocho.” Aquí él ya se dio, porque llagábamos al final del ajarsisio y aún no había andavinado la solusión. De modo y manera que ramató con este verso: “Diga el nombre del conducho.” Pero el puñatero, con pardón, me clavó la última bandarilla hasiendo sarvirt una nueva palabra que tuve de buscart al dicsionario. Y al final yo que daclaro: “Un chucho.”

MARQUÈS. ¡Acabáramos!

PEP. Daspués le pusimos por título “Buen provecho” y la antragamos. En fin, que pasé muchas panalidades, pero valió la pena, porque el profasor nos puso un nueve y medio sobre dies, layó nuestro trabajo dalante de toda la clase y dijo que ascribíamos casi con tanta parfacsión como la Carmina Burana, que ya era la rapera.


MARQUÈS. ¿Quién es, una cantante de rap?

PEP. No, no. He dicho la rapera por no dasir la rapanocha en prasensia de ustet. El no va más, ¿me asplico?

MARQUÈS. Claro que sí. Bueno, hablando de otra cosa, yo te llamaba para notificarte que a la postre han aprobado mi solicitud.


PEP. Ah, ¿ve cómo mis buenos ofisios han sarvido de algo?

MARQUÈS. Cualquier día lo vamos a celebrar.

PEP. A ver si es vardat.

MARQUÈS. Sí, hombre, no pases cuidado. De momento te doy las gracias por tu gestión. Más adelante ya te recompensaré como mereces.

PEP. Astoy a la aspera, pues.

MARQUÈS. De acuerdo. Mientras tanto, aplícate a tus estudios.

PEP. Qué ramedio.

MARQUÈS. Hasta otra, querido José.

PEP. Adiós, sañor marqués.