3.10.08
DIÀLEGS DE CORTESANS. Turbulència
SECRETÀRIA. ¿Digui?
MARQUÈS. ¿Don José Cifuentes?
SECRETÀRIA. Ahora no está. ¿De parte de quién?
MARQUÈS. Del señor marqués.
SECRETÀRIA. Si puede usted llamarle hacia las cinco de la tarde, seguro que le encontrará.
MARQUÈS. Muchas gracias, señorita.
(Quatre hores després.)
PEP (cantant). Teeeeengo ganas de bailart el nuevo compás. (Amb veu normal, si se’n pot dir així.) ¿Digui?
MARQUÈS. Caramba, te noto muy marchoso.
PEP. Es que hoy llevo un alé..., hip, un alétrico que ni el mismísimo san Pascual Bailón me podría pasar la mano por la cara. He cogido una tostadora de padre y muy sañor mío.
MARQUÈS. ¿Cómo dices?
PEP. Quiero dasirt un mirlo. En fin, hip, que llevo un punto de asul.
MARQUÈS. Como no te expliques mejor...
PEP. Hombre, que por dentro astoy ampapado.
MARQUÈS. Lo que estás es enmamado, si me permites la ordinariez. ¿No te da reparo ponerte al teléfono en este estado tan deplorable?
PEP. Yo no raparo en gastos cuan..., hip, do paga un otro. Yendo de baldraga, todo me es patria.
MARQUÈS. Pero ¿qué habéis celebrado?
PEP. ¿Que no sabe qué día es mañana? ¡San Frasquito!
MARQUÈS. ¿Y qué?
PEP. Lo dasimos así porque cada a..., hip, ño vasiamos unas cuantas ampollas. Y como que esta ves se ascae en sábado, pues lo hemos salabrado hoy.
MARQUÈS. ¿Y qué tiene de particular esta festividad?
PEP. Pues que es la anomástica de nuestro, hip, jafaso, el Fransisco Ortuño. (Cantant.) Es un muchacho axalente, es un mu..., hip, chacho axalente...
MARQUÈS. ¡Dios mío, cómo está el patio!
PEP. Ahora ya se ha daspajado, pero antes astaba que no cabía ni una punta de aguja. Como que el Ortuño astudió la carrera de car..., hip, malito dascalso, y daspués, cuando plagó los gosos, antró a la administrasión y no ha parado de asandert, pues tiene un futral, hip, de amigos.
MARQUÈS. O sea que lo habéis celebrado en grande.
PEP. Nada más le diré que la fiesta ha comansado a las onse, y hasta las cuatro no hemos tarminado.
MARQUÈS. ¿Tanto rato?
PEP. Bueno, primero han habido los discursos y los parabienes, hip, que es lo que ha acupado más aspasio. Si ha llagado un momento que yo ya me flo..., hip, me florasía, porque salía uno y daclamaba: “Si me pongo a avocart aquellos viejos tiempos en que...”, y blabla..., hip, blablá. Y mientras los tanía allá antratanidos a..., hip, avocando aquellos viejos tiempos, me he ido a hasert una vuelta por ver si me podía abocart un poco de mo..., hip, de morapio.
MARQUÈS. Tú siempre aprovechando la ocasión.
PEP. Es que yo ya he subido así, ¿eh? Desde chicharelo, hip, ya me trastocaba por el charelo.
MARQUÈS. ¿De modo que se trataba de beber a palo seco?
PEP. Hombre, también había safatas con canapés y montaditos, ¿qué, hip, qué se piensa?
MARQUÈS. Ah, bueno.
PEP. Y al final, cuando han acabado los discursos y el Ortuño ha dicho: “Venga, ya podéis, hip, ampasart”, yo ya me había ampasado trenta o cuarenta piesas.
MARQUÈS. ¡Atiza!
PEP. No, si de jalansia he cadado ambol..., hip, dragado, no le angaño. Pero, qué quiere que le diga, a mí me ha hecho consiensia la cantidat de cosas que iban a parart a las ascombrarías. Y aún suerte que, hip, cuando ya racogían la vajilla, he sido a tiempo de ponert a salvo un par de copas, porque ya astaban a punto de lansart el vi..., hip, no, malaguañado.
MARQUÈS. Pues habrás quedado servido.
PEP. Huy, si cuando volvía al das..., hip, pacho he hecho una como un cuévano. Por el pasillo me he ancontrado una sagrataria, hip, que me ha dicho: “¡Huy, cuánto marramango!” Y yo que le raspondo: “Pues te tandrás de arramangart un poco más, porque des..., hip, de aquí no se nota.” Y, mire, ya he pardido la vargüensa y le he soltado: “Ven, ta..., hip, soro, que te haré una agarbonada de aquí te aspero.” Y sí, sí: yo ya me he cadado allá asparándola, ya, hip, pero ella...
MARQUÈS. Ha puesto pies en polvorosa.
PEP. ¿Qué dise que qué?
MARQUÈS. Que se ha escabullido.
PEP. Ya lo puede bien dasirt. Ahora, que ella jugaba con va..., hip, vantaja: primero porque yo con las eses no la podía ampaitart, y sagundo porque los michalines, ¿sa..., hip, be?, me frenan mucho.
MARQUÈS. ¿Siempre tienes que estar barruntado porquerías? Parece que tú, en vez de seso, sólo tengas sieso.
PEP. Mire, ahora no astoy por disquisisiones.
MARQUÈS. Tú vas a la tuya, ofendes a quien sea, y luego pelillos a la mar.
PEP. ¡Palillos, palillos...! ¿Que se piensa que porque tengo poca vajata..., hip, sión al cuero caballudo ustet ya tiene darecho a convartirme en blanco de sus insultos? Pues no sañort. (Cantant.) Ya viene el negro sumbón, hip...
MARQUÈS. ¡Hurra!
PEP. Menos chirigota, ¿eh, sañor marqués?
MARQUÈS. Es que de verdad que me das lástima.
PEP. ¡Dónde se es visto, faltarme al raspeto de esta manera!
MARQUÈS. Hay momentos en que eres un impresentable.
PEP. Rabusnos de asno no llegan al sielo.
MARQUÈS. ¡Cochino!
PEP. ¡Ande, y que le den pol rulé! (Clic.)
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada